11 de mayo de 2014

B de Berta y Beatriz

Así es como se llaman mis hermanas, Berta es la mediana y Bea es mi hermanita pequeña, las tres somos morenas pero ellas además son muy  guapas, más altas que yo, y muy inteligentes, mucho más que yo.
Ambas son muy diferentes, Berta es la que está al día en las nuevas tecnologías, y la que me echa una mano cuando tengo problemas y me resuelve las dudas. Ella fue quien me regalo un IPhone unas Navidades, regalo que me dejo sin palabras, y que hizo que conociera el mundo 2.0 de una forma un poco más profunda. Porque desde el IPhone escribo post, navego por internet y tuiteo; porque en casa no tengo internet todavía, y que para mi ha sido y es uno de los mejores regalos que me más ilusión me han hecho en los últimos tiempos.
Berta, que vive en Barcelona pero que gracias al what app parece que vive en Santander porque hablamos todos los días.
Bea, es la peque (aunque ya tiene unos añitos, jajajaja), es la que me regala un bolso de PG (me encantan) cuando Mini Yo estrena Dafo, para que me recupere del susto (las Dafo cuestan una pasta). La que cuida a Mini Yo junto con mi madre cuando tengo que trabajar. La que organiza alguna cena informal en su casa  para que me despeje un poco cuando estoy muy cansada o hace tiempo que no salgo.
Entre las tres hay una buena relación, muy buena, cuando estamos juntas unos días aprovechamos para salir de cena y de copas como cuando éramos más jóvenes y recordamos tiempos pasados. Las tres somos una piña, nos unimos en la adversidad y nos alegramos de los triunfos de cada una, esa unión ha sido posible gracias a mis padres: Javier y Piti. 
Mis hermanas que me apoyaron cuando me separe, y que siguen estando ahí cuando necesito cualquier cosa, sin ellas, sin su respaldo, consejos, ánimo, palabras de aliento no creo que hubiera sido capaz de seguir en algunos duros momentos.
Berta y Bea mis hermanas, pero sobre todo: mis mejores amigas.

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