7 de noviembre de 2013

Maria de Villota

La vi de refilón este verano, una noche, estaba con su marido y una pareja sentados tomando un helado, yo salía con mis hermanas e íbamos a tomar unas copas (si ya hubiera tomado alguna, seguramente me habría acercado a ella a decirle lo que todos pensábamos, que era un ejemplo de afán de superación, un ejemplo a seguir ...), la reconocí por su parche y su eterna sonrisa ... y no había vuelto a pensar en ella hasta el día en que se fue. Pero sobre todo al día siguiente, cuando leí en la Revista Yo Donna su último artículo: "Lo mejor de ti", en el cual decía: "Decidme, ¿cuántos de nosotros nos sentimos campeones en el día a día cuando la vida aprieta, si no llegamos a fin de mes o nos cuesta sonreír a causa de nuestros problemas o de una enfermedad? Igual no muchos. Por eso, creo que aunque no nos sintamos en un principio ganadores, debemos actuar como si lo fuésemos, creciéndonos ante las adversidades, sonriendo a la vida, cambiando nuestra actitud hacía los problemas llevando las enfermedades con valentía. Y entonces, sólo en ese momento, os aseguro que nos sentiremos campeones, y más importante, lo seremos, aunque no haya pódium con laurel y champán. Habremos vencido" y entonces pensé en ella, y pensé que existía una "mágica conexión" entre ella y Mini Yo ( y no soy yo de creer en casualidades, en el karma y esas cosas), pues tenían muchas cosas en común:

-Las dos se llaman María.

-En su cara siempre había y hay una eterna sonrisa.

-Las dos han luchado y luchan por superar sus adversidades.

-Las dos tenían y tienen una familia que las apoya.

-El primer escrito sobre Mini Yo fue para un concurso organizado por Yo Donna y Pavo Frío, y en ese escrito hablaba de como celebraba con Mini Yo sus "triunfos" igual que los deportistas. Podéis leerlo es el post: una mujercita maravillosa; y creo que su último articulo para esta revista tiene una "extraña" relación con él mío. (Y perdón por mi osadía, al comparar los dos artículos).

Así que, hoy, me arrepiento de no haberme acercado a decirle nada, porque ya no puedo hacerlo; pero sé que desde el cielo estará sonriendo y estoy convencida de que su fuerza, su valor, su entereza, todas sus ganas de vivir, se las transmite a Mini Yo y a muchas personas que lo necesitan.

Así que desde este, mi pequeño rincón, Gracias María.

2 comentarios:

  1. nos hace mucha falta gente como tu, que ante las dificultades se crezcan, no olvidemos que los Miuras solo se dan en España, y aunque la comparacion pueda parecer denigrante,creo que eres un ejemplo y que puedes ser muy beneficioso para tanta gente que la vida no ha sido generosa con ellos, y yo me pregunto ¿porque ?
    adelante y animo.y espero que esta vez el mensaje llegue, porque he escrito varias veces, pero no se que ha pasado...

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    1. Mil gracias, por tus palabras de ánimo y aliento. Que esta vez si han quedado reflejadas en el blog.

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